Gracias por tu entrega
Un padre es la seguridad de que, aunque existan problemas, todo tiene solución. Es aquella persona a la que se acude para pedir consejos, para contar una anécdota o para buscar consuelo. Es aquel hombre que entrega tiempo, comodidad y preferencias. Aquel que comprende que nada, absolutamente nada, se compara a la felicidad de su pequeño.
Es la persona que, comprendiendo su misión e influencia, guía a sus hijos en los pasos de Jesús. Y esto, no solo con palabras, sino con su ejemplo y actos de bondad.
Deseamos celebrar la entrega que realizan los padres. Celebremos sus abrazos, sus miradas, su creatividad, su compañía, su paciencia y la felicidad que cada día transmiten. Agradezcamos y reconozcamos que, sin su entrega, ¡nada sería igual!
Papá, “…que Dios te bendiga y siempre te cuide” (Números 6:24, TLA)
Es el deseo de la Educación Adventista. ¡Muchas gracias!
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